SUMARIO
1- Leve condena para el asesino de Carlos Bustamante
2- Nada nuevo para la mendocina (nota de CORREPI que la Revista XXIII decidió no publicar)
3- Solicitada por la Noche de los Lápices
4- Marcha Federal
5- Solidaridad con compañeros de Comodoro Rivadavia
6- Represión en todo el país
7- Repudio a Juez Federal
8- Cátedra de CORREPI en Neuquén
LEVE CONDENA PARA ASESINO DE CARLITOS BUSTAMANTE
Los jueces Marcelo García Helguera, Ezequiel Igarzábal y Carlos Vales Garbo, del Tribunal Oral 3 de San Isidro, tienen antecedentes de absoluciones a policías. En 2003 dieron sólo 8 años de prisión a un policía y absolvieron a otros cinco por el fusilamiento de Alejandro Levickas, quien murió de cinco balazos policiales. En junio de 2004 absolvieron al sargento Norberto Gallo, que mató de un tiro en la cabeza al albañil Gustavo Luna, de 26 años, tras acusarlo de tirar piedras contra su camioneta. El más reciente fue el que condenó al cabo Emir Champonois a 8 años de prisión por el fusilamiento del músico Mariano Wittis, absolviéndolo por la muerte de Darío Riquelme, presunto ladrón, en el mismo hecho. Esta decisión fue anulada por la Cámara de Casación provincial. Finalmente, hace pocos meses, absolvieron escandalosamente a Héctor Eusebio Sosa, que fusiló con cinco balazos a Víctor “Frente” Vital (16) mientras el pibe se escondía bajo una mesa.
Esta semana tuvieron a su cargo el debate en el que se juzgaba a Carlos Barros, agente d ela policía federal, por el homicidio de Carlos Bustamante (21), ocurrido el 30 de agosto de 2004. Cumplía 15 años Alejandra, cuñada de Barros, y en su casa la familia se mezclaba con los adolescentes invitados a la fiesta. Uno de los amigos de la familia, de mayor edad, insultó al novio de Alejandra, también de 15 años. Se desató una desigual pelea en la que los adolescentes fueron echados de la casa por Barros y sus amigos. Carlos, ajeno al episodio, salió a la vereda junto con otros invitados y reprochó al policía y sus amigos “¡Cómo les van a pegar así a esos pibes!”, gritó. Luego todos empezaron a retirarse. Barros sacó su 9 mm reglamentaria y disparó unas diez veces hacia el grupo de jóvenes. Una de las balas impactó a Carlos en la parte baja de la espalda y le seccionó la arteria ilíaca. Minutos después estaba muerto.
La treintena de testimonios y las pericias no dejaron un solo resquicio para que el policía evitara la condena: todos (incluso sus parientes y amigos) reconocieron que los muchachos, entre ellos Carlitos Bustamante, se estaban yendo cuando Barros empezó a disparar. Se probó también que sólo cinco vainas fueron recuperada sporque cuando la bonaerense llegó al lugar el federal estaba revisando la vereda, recogiendo las vainas servidas para esconderlas (se encontró una en su bolsillo). La fiscalía, representada por el Dr. Palacios, pidió 12 años de prisión por homicidio agravado por el uso de arma de fuego (art. 79 y 41 bis del Código Penal). La familia Bustamante, representada por abogados de CORREPI, acusó por homicidio agravado por la condición de policía (art. 80 inc. 9º del CP) y solicitó prisión perpetua.
El martes a la tarde, siguiendo la “tradición” del TOC 3, que convirtió los juicios orales y públicos en sólo orales, pues los celebra en una salita con capacidad para seis personas incluyendo partes, se dio lectura al veredicto. Los tres jueces no se animaron a dar la cara. De tan cobardes que son, ni siquiera se hacen cargo de lo que firman. Mandaron a leer el fallo a una pobre secretaria que tembalaba como una hoja, avergonzada de la sucia tarea que tuvo que cumplir. Ni sillas suficientes había para los abogados, los padres y la compañera de Carlos, que escucharon de pie que para los señores jueces, el asesinato fue “sin intención de matar”, porque lo condenaron a tres años y medio por homicidio culposo. Como si lo hubiera atropellado con el auto en un lamentable accidente.
Nadie dispara diez u once veces una Browning 9 mm. por accidente, y menos a la espalda. Como dijimos en el alegato, al sostener el pedido de falso testimonio para un bonaerense al que también el fiscal acusó de haber encubierto al homicida, “federico o patanegra, al fin de cuentas es un poli”. Así también habrán pensado estos señores jueces, que siguen sumando puntos en su curriculum. Sigan así, que el pueblo tiene memoria.
NADA NUEVO PARA LA MENDOCINA (El martes 13 la Revista XXIII encargó a CORREPI una nota a propósito del jugador de fútbol al que un cabo de la policía mendocina disparó a quemarropa. El compañero Daniel Stragá la redactó y envió, pero al salir la revista notamos que en su lugar los Lanata boys publicaron otra del políticamente correcto CELS, que atribuye el hecho al “alto grado de autonomía de algunas policías”… Este es el artículo que XXIII no quiso publicar:)
Hace exactamente 6 años, Roberto Luquez tenía 17. Caminaba por las calles polvorientas de Maipú, Provincia de Mendoza, cuando lo interceptaron tres policías. No tenía documentos y echó a correr. Se escondió dentro de una casa. Hasta allí lo fue a buscar el cabo Schiarello. Portaba una Itaka cargada con perdigones de goma. Cuando lo tuvo enfrente le disparó al pecho a una distancia de 70 cm. A las pocas horas moría en un hospital.
El mismo método, la misma arma, las mismas postas de goma, la misma policía. Mendocina y de gatillo fácil.
El mismo método, la misma arma, las mismas postas de goma, de cualquier policía en el país a la hora de “encarrilar” cualquier incidente en un espectáculo deportivo. El de Mendoza no es un loquito suelto. En las filas policiales no hay “loquitos”, ni abusos ni excesos.
Innumerables son los hinchas de cualquier club y de cualquier división del fútbol argentino lesionados por balas de goma disparadas por la Federal o las provinciales. No son nuevos los escopetazos en tórax o rostro, con perforaciones pulmonares o pérdida de la visión provocadas por “guardianes del orden”. Que espectadores sean lesionados, aún gravemente, por efectivos policiales, no es novedoso. Como tampoco es novedosa la violencia policial en el marco futbolístico. Este año se cuentan dos muertos, en Córdoba y en el Bajo Belgrano.
Lo que es novedoso es que, por primera vez, la policía la emprende con un participante del espectáculo deportivo. Es la primera vez que atentan contra un jugador de fútbol.
Como a Roberto Luquez, a Carlos Azcurra le tiraron a quemarropa, impactando en el pecho. El médico del plantel de San Martín de Mendoza fue clarito: “podría haber muerto en el acto”.
Las imágenes televisivas y fotográficas fueron demasiado contundentes como para encubrir el hecho. Las pruebas demasiado elocuentes para que hasta el propio gobernador saliera a alentar condenas. Ahora el cabo Marcial Maldonado de la mendocina está acusado por homicidio en grado de tentativa. Probablemente la indignación “deportiva” (¿por qué, señores periodistas, estos hechos van a las páginas deportivas y no a las policiales?) mantenga el hecho en la opinión pública o publicada. Es de esperar que cuando sea la hora de juzgar su conducta criminal, los jueces no consideren que se trató de un hecho culposo, por negligencia, impericia, imprudencia. Que no digan que Maldonado “se equivocó” y lo premien con penas que no alcanzan ni a cubrir la expectativa de justicia.
SOLICITADA POR LA NOCHE DE LOS LAPICES (Solicitada aparecida en el Diario Página/12 el sábado 17 de septiembre impulsada por la organización HIJOS)
A 29 AÑOS DE LA NOCHE DE LOS LAPICES
Este 16 de septiembre homenajeamos a los estudiantes desaparecidos por luchar. Y no podemos dejar de recordar que en 1998, cuando se realizó el Escrache a uno de los máximos responsables de esa negra noche en 1976, Miguel Etchecolatz, fuimos brutalmente reprimidos y perseguidos hasta la Facultad de Ciencias Sociales, la cual tambien fue “gaseada”en su interior. Todo esto bajo las ordenes del Comisario Néstor Valleca, el mismo que este 16 de Septiembre estará a cargo del operativo de la marcha.La CORREPI le ha iniciado una causa penal por este hecho en ese año.
Repudiamos toda actitud represiva del Estado y particularmente a Valleca por sus antecedentes, por reprimir la manifestación del Escrache a uno de los máximos responsables de la Noche de los Lápices en 1998. Los espacios de construcción colectiva no se silencian con medidas arbitrarias. Los reclamos no se callan con represión , persecución y cárcel Las reivindicaciones no se frenan con “cercos policiales” ni plazas cerradas o caminos alternativos.
Porque las reivindicaciones de los 30.000 desaparecidos tenían que ver con cosas viables que aún están vigentes: Educación, salud y trabajo para todos, salarios dignos, redistribución de las riquezas, el fin de la impunidad, las grandes transformaciones.
MARCHA FEDERAL
Con la excusa de que Pérez Esquivel lo llamó por teléfono y le pidió que dejara pasar la manifestación, el gobierno K tuvo que abrir las puertas de la Av. de Mayo. Tuvieron que permitir que las organizaciones estudiantiles, de piqueteros y la izquierda se manifestara. Sin coartar ni el destino histórico de toda la movilización popular en la Argentina por el trayecto que siempre se siguió cuando el pueblo quiere reclamar.
Pero en otra clara señal de que no aceptará ninguna protesta contra esta gestión, anunciaron que a esta manifestación la dejaban pasar pues era una reinvindicación de lospibes desaparecidos en la Noche de los Lápices. Una vez más, asumiendo infamemente como propia la defensa de los DDHH (siempre que sean del pasado).
Si ese ruego de parte del premio Nobel o de cualquier otro sector de los DDHH existió, CORREPI lo califica como claudicante y chupamedias. El gobieno debió abrir las vallas policiales ya que de mantener la prohibición de la protesta no hubiera podido evitar la consecuente comparación con cualquier dictadura. Hay que decirlo con claridad, ningún gobierno institucional se atrevió a impedir la protesta. Utilizando el verso de los inconvenientes de tránsito, sólo este gobierno cínico quiere cerrar las puertas del democrático derecho a peticionar a las autoridades.
La marcha, de las más numerosas de los últimos años, no fue un recordatorio lacrimógeno de la desaparición forzada de los secundarios. Muy por el contrario, importó un altavoz de crítica a la política económica y social de este gobierno, y una caja de resonancia de las reinvindicaciones sociales y económicas de trabajadores y desocupados.
Este gobierno repetirá la maniobra de impedir nuevas y mayores movilizaciones sociales. De acrecentarse el conflicto social -lo que es previsible-, serán más masivas y más combativas. No habrá llamados telefónicos de ningún “jetón”, por más oficialista que sea, para levantar la muralla policial, y mucho menos para impedir la represión que sobre la protesta está poniendo en práctica el gobierno.
REPUDIO CONTRA JUEZ FEDERAL
La Cámara Federal de San Martín, hija dilecta del Camarón y de los postulados protofascitas de Jaime Smart, es, probablemente, el baluarte más cerrado de la defensa del genocidio militar. Numerosas han sido las resoluciones de neto contenido encubridor hacia los militares. Cualquier causa que recaiga en su jurisdicción cuenta con la garantía de la impunidad. Uno de los adalides de la denegación de justicia para las víctimas de violaciones a los derechos humanos, es el Juez de San Martín, Alberto Martín Suares Araujo.
La última del inefable magistrado ha sido denegarle a la Federación Juvenil Comunista el carácter de querellante en la causa Riveros dentro de la cual se investiga el brutal asesinato del adolescente Floreal Avellaneda. El del Negrito Avellaneda es un caso paradigmático que llegó al Juicio a las Juntas y todavía hoy nos sobrecoge por el horror: un adolescente de catorce años al momento de la captura, y de quince al momento de hallarse su cadáver, empalado y arrojado a las aguas del Río de la Plata, recogido en la orilla uruguaya e identificado en aquellos años.
En sus considerandos el Juez afirma que “no resultan aceptables los motivos invocados en virtud de que las razones expuestas por los presentantes (la pertenencia de Floreal a la organización, el carácter anticomunista declarado de la dictadura y su objetivo de aniquilar una identidad cultural que sobrepasaba cualquier institución partidaria) no acarrean un perjuicio directo y real para la organización que representan…”
Semejante argumento sería un absurdo jurídico, si la resolución fuera jurídica. Con tal de bancar a la defensa niegan la posibilidad de que el partido al que el chico Avellaneda pertenecía actúe como acusador particular porque su secuestro, tortura y asesinato “no acarrearon perjuicio directo y real a la organización”.
Lo que el juez quiere -como muchos de sus colegas- es que quede todo en mano de fiscales tan proclives a ideologías autoritarias como por ejemplo el fiscal ante la Cámara de Casación Romero Victorica que, al momento de su asunción a ese cargo, se apretó en un abrazo con su amigo José A. Martinez de Hoz, y así evitar tanto querellante pesado patrocinado por abogaditos zurdos molestos que pretenden denostar a instituciones tan probas para la patria como el ejército o la policía.
SOLIDARIDAD CON LOS COMPAÑEROS DE COMODORO RIVADAVIA
El viernes 9 de setiembre en horas de la madrugada los compañeros de Asociación Civil Grupo Pro Derechos de los Niños de Comodoro Rivadavia sufrieron un atentado en la sede de su organización. “Desconocidos” irrumpieron en las instalaciones y robaron todos los equipos de transmisión de la radio comunitaria FM del Chenque, y toda la información de la Organización contenida en las CPU. Alarmados vecinos llamamron en el momento al comando radioeléctrico de la policía local, cuyos móviles, dando zona liberada, no acudieron.
Este no es el primer hecho de violencia e intimidación que sufren los compañeros y tiene vinculación directa con la acción de denuncia y defensa de los Derechos Humanos que llevan a cabo. Es evidente que este atentado entorpecerá la lucha de los compañeros pero no los hará cejar en su compromiso popular.
CORREPI se solidariza con los compañeros. Responsabilizamos al Gobierno de la Provincia del Chubut y a la Municipalidad de Comodoro Rivadavia de este hecho, como así de todo otro que ponga en peligro la vida, integridad física y la actividad de los compañeros de la Asociación.
REPRESIÓN EN TODO EL PAÍS
El miércoles pasado pudo haber sido designado como el “Día de la Represión” de la semana. A lo largo y ancho del país gobernado por el campeón de los Derechos Humanos se sucedieron represiones contra todo aquel que protestara por algo. Vayamos a los ejemplos:
En la madrugada del miércoles 14 un grupo de 15 matones aproximadamente, comandados por los gerentes de la empresa y la Policía de General Pacheco, atacó violentamente (con palos, piedras, ladrillos, agua) a los 10 trabajadores del Frigorífico Tango Meat. A tal punto los parapoliciales contaban con el apoyo de la bonaerense, que cuando los matones se retiraban de la planta, un móvil de la Comisaría de General Pacheco (camioneta 10222, chapa EMB 229) intentó atropellar a varios compañeros que estaban en la vereda.
El mismo miércoles los trabajadores de FOETRA intentaron de hacer una asamblea en la Avenida de Mayo por un conflicto sindical. Al interrumpir parcialmente el tránsito en el cruce con la calle San José, apareció la Federal y los desalojaron a los golpes. Un telefónico que recibió palazos en la cabeza y una pierna debió ser internado en el Hospital Ramos Mejía.
En General Mosconi, Salta, se registraron ocho detenidos y un herido grave por la represión de la policía de Romero contra trabajadores que se habían concentrado frente a las oficinas de Contreras Hnos -contratista de la multinacional Pan American Energy- buscando concretar la promesa incumplida de otorgar 90 puestos de trabajo. La policía reprimió con palos, gases y hasta disparos de armas de fuego, con postas de plomo. Un herido ingresó al Hospital de Tartagal con diagnóstico de convulsión cerebral, víctima de los palazos.
Al día siguiente hasta los ecologistas de Greenpeace fueron corridos hasta la Plaza Colón, detrás de la Casa Rosada, cuando reclamaban contra la venta de una reserva natural en la provincia de Salta. Parece que al gobierno K no le gustó que se disfrazaran de pingüinos.
CATEDRA DE CORREPI EN NEUQUÉN
Invitados por la Universidad Nacional del Comahue, CORREPI desarrollará durante el mes de octubre una cátedra antirrepresiva dirigida a estudiantes y jóvenes abogados. El temario suscintamente comprende el rol del Abogado de DDHH, las detenciones policiales, cuestiones procesales prácticas de defensa, querella o particular damnificado, juicio oral y actuación ante la Corte Interamericana de Derechos Humanos.
Las clases estarán a cargo de los abogados Martín Alderete, Gerardo Etcheverry, Luz Palmas Zaldua, Daniel Stragá y María del Carmen Verdú, con la coordinación del Dr. Fernando Dalmazzo, de reconocida labor en derechos humanos en Neuquén y Río Negro, en causas como el triple homicidio de Cipolletti y el homicidio de Teresa Rodríguez.
RIFA DE LOS FAMILIARES: Con el fin de recaudar fondos para la reproducción de materiales para desarrollar el trabajo barrial, los familiares de las víctimas del gatillo fácil organizados en CORREPI han organizado una rifa por el valor de $ 2 que se sorteará el día Sábado 15 de Octubre, en vísperas del día de la Madre, con la Nacional Nocturna. Los premios son: 1 Reproductor DVD, 1 Plancha y 1 Premio Sorpresa. Esperamos tu colaboración.
CORREPI EN FM LA TRIBU (88.7), lunes 10:30 y jueves 18:30, semana por medio.
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