Boletín Informativ Nº 486

COMISARIO SALCEDO, EL DESPRECIO POR LA VIDA, Y LA DELINCUENCIA ORGANIZADA.
La noticia policial de la semana estuvo en La Plata: tres o cuatro delincuentes ingresaron a la casa de un herrero en Ringuelet. Su ex mujer y vecina escuchó ruidos extraños y llamó al 911. En cuestión de minutos, cuatro policías de la 11ª ingresaron a la vivienda; se produjo una balacera que dejó como saldo dos muertos y un herido. Entre los muertos, “la víctima inocente”, y “un chorro”. Lo que resta determinar aún es de qué arma partieron los disparos que terminaron con la vida de Juan Carlos Holowko (62), ya que tanto los policías, como uno de los delincuentes armados, portaban pistolas 9mm. Ante la duda, el ministerio de seguridad pasó a disponibilidad preventiva a los cuatro oficiales que intervinieron “hasta tanto se esclarezcan las circunstancias del lamentable episodio”.

Estos hechos llevaron al jefe de la bonaerense Daniel Salcedo a brindar una conferencia de prensa, en la que se mostró preocupado porque “cada vez se nota más, por parte de los delincuentes, el desprecio por la vida tanto en lo que se refiere a la víctima como a su vida propia”. Lo dijo el jefe, quien en 1987, siendo un joven oficial de la fuerza, atropelló y mató a un pibe de 9 años en Castelar. Una vecina, testigo del hecho, dijo que vio a Salcedo muy tranquilo: “sonreía como si no hubiese pasado nada” mientras charlaba con sus compañeros que llegaron al lugar. La declaración se la tomaron sus subalternos y compañeros de la comisaría 7ª de Morón donde trabajaba, que también estuvieron a cargo de las pericias. Al año era sobreseído, y pese a las irregularidades, la causa fue archivada.

El jefe policial es partidario de endurecer el código penal porque “casi todos los delincuentes que intervienen en este tipo de hechos tiene antecedentes”. Y sigue: “los delincuentes tienen un fácil acceso a las armas de gran calibre, y eso pone en inferioridad de condiciones a las fuerzas de seguridad”. Lo que no aclara es cómo un delincuente común logra armarse con pistolas 9mm similares a las empleadas por la fuerza que él dirige. Y la excusa de la inferioridad de condiciones es negada cotidianamente por la realidad.

Sólo en la ciudad de La Plata, los medios de comunicación le adjudican a la creciente ola de inseguridad, la cifra de nueve muertes en robos a mano armada en 2008. El número de víctimas es la excusa para seguir exigiendo, desde las portadas, más seguridad, mayor presencia policial y mejor preparación para los integrantes de la fuerza. Lo que se omite en la información es que al menos cinco de esas muertes –que ascenderían a seis de comprobarse si Holowko murió por balas policiales- corresponderían a asesinatos cometidos por policías, incluidos los de dos pibes de 15 años. O siete, contando el asesinato de Miguel Ángel Serrano en Los Hornos hace menos de un mes, atropellado intencionalmente por el policía Marcelo Palomo de la comisaría 3ª, que se dio a la fuga.

Cinco delincuentes abatidos, todos de frondoso prontuario como de costumbre; y una víctima inocente, dirían los medios, producto de la falta de capacitación o alguna otra justificación para disimular lo evidente: la policía fusila; primero dispara, después pregunta, y disponen de todas las facilidades para imponer su inobjetable versión oficial en los medios.

Como sucediera tras el triple crimen de la planta transmisora, los medios, haciendo nuevamente eje en el flagelo de la inseguridad, impusieron, reproduciendo el discurso de las altas esferas policiales, el móvil pasional de un despechado. Después, la de los equipos de transmisión valuados en millones de pesos y, tibiamente, la versión de que perros adiestrados del Servicio Penitenciario para detectar drogas “marcaron” una caja que habría contenido grandes cantidades de cocaína o marihuana. La fiscalía mandó a Gendarmería a realizar la pericia, que consiste en la incineración de la prueba, con el objetivo de determinar si las emanaciones gaseosas se corresponden con la posible presencia de estupefacientes. Pese a las dudas, una certeza: no sabemos qué determinará la espectrografía gaseosa; sí que la caja, única prueba que sugiere la pista del ajuste de cuentas por drogas, va a ser destruida. Las sospechas sobre esta tercera hipótesis cobraron más fuerza el pasado martes cuando el fiscal esperó durante horas que la policía científica le remitiera la famosa caja. Las dudas sobre la preservación de la prueba llevaron a la fiscalía a iniciar un sumario administrativo a todos los policías involucrados en su traslado y custodia.

Fusilando pibes en las calles, torturando en cárceles y comisarías, gerenciando el narcotráfico y hasta matándose entre ellos, las fuerzas de seguridad, los gobiernos y los medios de comunicación proponen, ante los asesinatos como consecuencia de su política de control social y distintos delitos perpetrados desde la misma fuerza, “solucionarlos” con más policía, mejor capacitación, mejores pertrechos y, por supuesto, con la colaboración de la ciudadanía, que no debe dudar en llamar al 911.

ROBO A LA SOMBRA POLICIAL EN CHUBUT
En la provincia de Chubut, además de las ballenas de Puerto Madryn y los pingüinos de Punta Tombo, está el gobernador Mario Das Neves, el ultra-kirchnerista que, sin dejar de serlo, tiene planteada una fuerte disputa con el jefe de gabinete y se las ha arreglado para vender, sobre todo en Buenos Aires, la imagen de todo un defensor del federalismo, gran progresista y enemigo de la corrupción.

Sin embargo, en su provincia, el hombre se saca la careta progre y dice lo que realmente piensa, como lo muestran sus declaraciones a los diarios locales el sábado 28 de junio. Ese día, el diario Trelew de la ciudad homónima tituló: “El gobernador Mario Das Neves duro con la justicia: ¿Cómo no va haber robos si entran y salen?”. La catarata de barbaridades, que hacen parecer tibios demócratas garantistas a Blumberg y Ruckauf, se desencadenó con motivo de un robo sufrido por un diputado de apellido Sastre. El gobernador peronista se despachó a gusto: “los que están robando en Trelew, en Madryn, en Rawson, han llegado hasta Dolavon, y siguen robando, porque si entran a la cárcel, están pocos días y después salen, qué van a hacer. Para ellos es como que van a descansar un par de días a la cárcel”.

Después, dirigiéndose a los funcionarios de la justicia, dijo Das Neves: “esos señores andan por la calle y andan riéndose y metiendo miedo. A los señores funcionarios judiciales, pongan presos a esta gente, porque son siempre los mismos. Si los ponen presos seguramente vamos a vivir mucho más tranquilos. No le echemos la culpa a la Policía. La Policía los detiene, y después los sueltan. Es como un círculo vicioso”. Para rematar, terminó reclamando a la justicia que sea “mucho más dura, que no se anden fijando si falta una coma, o falta un punto, ¡déjense de joder!”. O sea, nada de estupideces inconducentes como el debido proceso, la presunción de inocencia o la defensa en juicio.

Pero el mismo día, en otro diario de la provincia, el “Diario de Madryn”, aparece otra noticia, que le cambia bastante el enfoque al tan publicitado robo que sufriera el diputado. Se informa ahí que los ladrones contra los que tanto despotricó Das Neves, serían los mismos que hace 20 días robaron la caja fuerte de un local comercial en esa ciudad. Según dice textualmente el diario de Madryn, en esa oportunidad “Los delincuentes habrían operado “bajo las narices” de personal policial que prestaba servicio de seguridad en el Bingo Municipal, que funciona frente al local donde se producía el robo. También se desprende que esa noche en que se cometió el ilícito se habría disparado la alarma del comercio -al menos una vez-, ya que documentalmente aparece que se habría enviado personal policial a verificar esa alarma y que se confirmó: “sin novedad”. Surge de la documentación de esa denuncia, que hasta ayer los investigadores afectados a la causa no realizaron un solo allanamiento en búsqueda de los elementos que fueran denunciados como sustraídos en ese comercio, como así tampoco se solicitaron órdenes para concretar ese tipo de procedimiento”.

O sea, como decimos siempre, y como los hechos se encargan de confirmar, resulta que esos peligrosos individuos son, o tienen vínculos, con la policía, que los deja operar tranquilos dejando zonas liberadas; que les brinda logística e información, o directamente integra, cuando no dirige, esas bandas. De nuevo nos queda claro quién dirige y ampara el crimen organizado en Argentina, sólo que esta vez, además, el gobernador de Chubut hizo el ridículo.

COMPLICE Y COBARDE, LA FAMILIA DEL MATAGUACHOS
“No tenemos representantes, no formamos parte de ninguna organización y no somos miembros de ninguna organización política. Somos una familia que nos arrebataron la paz, la tranquilidad, y destruyeron la armonía de nuestro hogar, que pocos podrán comprender. Hoy seguimos pidiendo que nos escuchen, hablando con la verdad, dentro de esta maldita justicia que se hace llamar, creyendo hacer lo correcto y siguiendo su pensamiento lógico. La verdad es que encerraron a un verdadero INOCENTE por el solo hecho de ser POLICÍA, con declaraciones sin argumentos, llenas de rencor, con sentimientos de venganza, cubriéndose en la organización llamada la CORREPI, pero si de algo estamos seguros es de que nuestra conciencia está en paz, y seguiremos buscando y demostrando el error que cometieron, los que dicen llamarse FISCALES de INSTRUCCIÓN, y JUECES DE GARANTÍAS, sin buscar realmente la verdad. AMIGOS Y FAMILIARES LUCHAMOS POR LA INOCENCIA DE PELOZO JOSÉ A.”

Los amigos de Pelozo, el Mataguachos, fusilador y administrador de la delincuencia y la extorsión en Villa Fiorito, recordado como “el rompehuesos” en Ezeiza, quieren hacernos creer que José A. es ahora una inocente palomita. Con un volante que reproduce el texto pegado arriba han empapelado los tribunales de Lomas de Zamora, donde el 3 de julio comenzará el juicio que se le sigue por el asesinato de Matías Bartola, que tenía 16 años cuando fue fusilado por este paladín de la justicia, este hombre de familia.

¿Los amigos de Pelozo carecen de representantes? Es evidente que están desdeñando las facilidades que el gremio policial les brinda, sino miren a Justo José Luquet que contaba con la defensa de los letrados Federico Luis María Hierro, abogado de planta de la PFA, primer defensor del comisario Miguel Angel Espósito en la causa Bulacio y con el Dr. Desimone, que defendió al policía federal Goyochea, custodio de Carlos Corach que fusiló a Marcos Viera en 1999, e interviene en la causa del 20 de diciembre defendiendo al comisario Santos y otros policías. Luquet resultó sobreseído, hallado inocente de fusilar al también menor de edad Marcelo Báez, por el mismo tribunal de solidaridad policial que sobreseyó al comisario Espósito.

¿No forman parte de una organización? ¿No es acaso la policía una Institución, una gran familia? ¿No están acaso abroquelados contra los huelguistas, los manifestantes, los piqueteros, los ocupas y todos los millones de pobres que cuando buscar cambiar su forma de vida se deben enfrentar con ellos? ¿No es una organización política el PJ que los dirige? ¿No es una organización política el estado que los forma y los arma?

Pelozo se reconocía a sí mismo, orgullosamente, como el Mataguachos, y esta familia vivió en paz y en armonía hasta que él cayó preso. Hasta allí convivió tranquilamente con el negocio de extorsión y asesinato que llevaba la plata a la casa. Por suerte aclaran que es una armonía y una paz difícil de entender, efectivamente ese pensamiento sólo lo puede entender y creer un policía. Y la forma de llorar una inocencia mentirosa es también la forma en que lloran en el banquillo los policías, capaces de torturar a un pibe hasta la muerte, de ver arder a un hombre vivo, pero sin el más mínimo grado de dignidad como para poder llevar adelante un solo acto sin el aval del poder al que sirven sumisos, y sin dudar a rebajarse a cobardes llantos para no caer en las cárceles en las que se amontonan sus miles de víctimas.

Este jueves comienza el juicio contra el Mataguachos, esperamos contamos con la mayor cantidad de compañeros para acompañarnos en esta pelea. 3 y 4 de julio de 2008, en los juzgados de Lomas de Zamora, Larroque y Camino Negro.

ATAQUE A DELEGADO DE WALL-MART
Una vez mas la burocracia sindical opera patoteando a los delegados de base, haciendo causa común con los patrones. Esta semana pasada fue agredido salvajemente el delegado de base de los supermercados Wall-Mart Avellaneda, Omar Díaz. El hecho sucedió en el mismo supermercado y se espera el informe del perito forense para establecer la gravedad de las lesiones.

El agresor fue identificado como Daniel Delgado, delegado gremial del sindicato de empleados de comercio y miembro de la comisión directiva de la seccional Lanús-Avellaneda, sindicato conducido a nivel nacional por el archiconocido burócrata Armando Cavallieri. Paradójicamente, Delgado está postulado por la lista celeste oficialista, como candidato al Tribunal de Etica del gremio de Lanús-Avellaneda.

Esta historia de la persecución sindical y las apretadas por parte de la burocracia, tiene ya antecedentes en Wall-Mart. En 2007, en ocasión de un conflicto gremial por despidos y libertad sindical, fueron amenazados delegados de base con llamadas telefónicas y panfleteadas en los lugares de trabajo. Nunca se pudo esclarecer nada, a pesar de que Wall-Mart tiene cámaras de video en todo el mercado.

Jugando siempre del lado de la patronal, negociando en desmedro de los trabajadores y reprimiendo cualquier intento de organización por fuera de la burocracia, las patotas sindiclaes son una pata más del aparato represivo del estado.

OTRO “SUICIDIO” EN COMISARÍA DE 9 DE JULIO
Gastón Noble, de 18 años, fue detenido el 23 de junio por la policía, acusado de haber robado, junto con un amigo de 17, prendas de vestir y un celular a un chico. Apenas un rato después, su cuerpo sin vida fue encontrado en la celda, aparentemente ahorcado con su propia ropa. La misma foto, repetida, de cada día en cuanta comisaría existe. Presos que a los 15 minutos se deprimen de tal modo que aunque estén detenidos por averiguación de antecedentes, por una contravención o por un delito leve, deciden matarse… no resulta creíble.

Así le pareció a la familia y los amigos de Gastón, que ya la semana pasada denunciaron públicamente que descreen de la versión oficial, y organizaron una marcha a la que concurrió un buen número de vecinos de 9 de Julio. La columna, después de dar vuelta a la plaza central, se detuvo a las puertas del municipio, exigiendo explicaciones al intendente Walter Batistella, ya que se trata de policia comunal.

Los organizadores de la marcha denunciaron también que “Hace rato que se sabe que en la comisaría de 9 de Julio se maltrata a los prisioneros, sobre todo a los jóvenes, más si son pobres e indefensos”. Como vemos, nada nuevo bajo el sol.

Desde CORREPI nos hemos puesto en contacto con amigos de la familia, y pese a la distancia los acompañaremos en su justo reclamo.

TORTURADORES EN APARICIO
El 17 de mayo de 2007 personal policial del destacamento de la localidad bonaerense de Aparicio, cerca de Tres Arroyos, informó que tras un intenso enfrentamiento había logrado detener a tres peligrosos delincuentes. Se trataba de los hermanos Maximiliano Daniel y Claudio Adolfo Rodríguez y su amigo Luciano Agustín Soto, que se desplazaban en una camioneta. Según la versión que presentaron los policías a la jueza, los hombres estaban cazando liebres, pero al acercarse la policía para identificarlos, comenzaron a dispararles. Los policías, como de costumbre, “repelieron la agresión”, hiriendo a uno de ellos y detuvieron a los tres. Muy poco después la jueza los sobreseyó, pues ni para ella resultaba verosímil el cuento policial.

Pero los tres muchachos, en lugar de limitarse a celebrar que fueron liberados y exculpados, decidieron hacer la denuncia por lo que realmente había pasado. Ahora se comprobó que los policías no sólo les dispararon sin motivo alguno, sino que también hicieron disparos contra su propio patrullero para sostener la versión del enfrentamiento. Los cuatro policías fuieron detenidos e indagados por los delitos de torturas y falsedad ideológica de instrumento público.

Se supo también que uno de ellos, quien comandaba el destacamento de Aparicio, el subteniente Santiago Walter, ya había protagonizado un violento episodio cuando trabajaba en González Chávez, e hirió a un joven en una discoteca, motivo por el que había sido exonerado de la fuerza, pero parce que se olvidaron de avisarle. Los demás detenidos son el teniente primero Damián Sandoval, el teniente Raúl Osvaldo Orellano y el oficial Walter Carabajal, que ahora también fueron desafectados. Ya veremos, en un tiempito, en qué comisaría reaparecen.

PRÓXIMAS ACTIVIDADES
Miércoles 2 de julio, a partir de las 10:00, en Tacuarí 138, el juzgado contravencional nº 16 de la ciudad de Buenos Aires juzgará por dos contravenciones (dos movilizaciones populares del mes de enero) al referente de la CUBa-MTR Oscar Kuperman, cuya defensa ejerce CORREPI.

Jueves 3 y viernes 4 de julio, en Camino Negro y Larroque, Lomas de Zamora, juicio oral al “mataguachos” de Fiorito, Ramón Peloso, por el homicidio de Matías Bárzola. Confirmaremos el horario a la brevedad.

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En La Plata, escuche Atando Cabos, el programa de radio de CORREPI, los lunes a las 20:00 por Radio Futura, FM 90.5.

Los sábados, a las 18:00, columna de opinión de María del Carmen Verdú en el programa Leña al Fuego, del periodista H. Schiller, por Radio Porteña, AM 1110, www.radiodelaciudad.gov.ar, tel. 5371-4600, Sarmiento 1551, 9° piso. Entrada libre y gratuita.

Los jueves, a las 12:30, columna de opinión de María del Carmen Verdú en el programa Ecos del Día, por Radio Cooperativa, AM 740, www.am740. com.ar.

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CORREPI