Boletín Informativo N° 370

GATILLO FACIL EN TODO EL PAIS
En el país del “gobierno de los derechos humanos”, el presente le escupe la cara a los ciegos y a los hipócritas. Esta fue una semana en la que las policías de diferentes provincias confirmaron que el estado viola a diario los derechos humanos, y que la “política positiva” que tanto defiende el gobierno se limita a meros símbolos y cuidadas puestas en escena.

En Santa Fe, cerca de los pastizales de la laguna Setúbal, a plena la luz del día, Andrés Rodriguez de 16 años fue muerto por la espalda por una bala policial. La mentira oficial justificante fue que el pibe, “delincuente de frondoso prontuario” -como dicen de todos-, intentaba robar uno de los chanchos que comen en un basural.

Andrés, en cambio, trabajaba junto a su padre en un establecimiento agrícola llamado Campo Chico, un kilómetro al norte de donde lo mató la policía. El día anterior había estado construyendo un cobertizo para los caballos que criaba. “A mi hijo lo mataron por la espalda cuando estaba cercado y sin posibilidad de escapatoria, después torcieron los hechos y lo presentaron como a un criminal. “A eso yo le llamo gatillo fácil”, sostuvo Rodríguez padre.

Dos horas después que el pibe fuera retirado moribundo hacia un hospital, se escucharon dos disparos en la zona. Los canas habían dicho que Andrés Rodríguez les había efectuado dos tiros y por ello tuvieron que repeler la agresión. Por supuesto horas más tarde -después de oirse esos dos disparos- “encontraron” un revolver en un totoral. Un “perro”, sin dudas, al que seguro le faltan dos proyectiles. Por supuesto, no hay detenidos.

De Santa Fe nos vamos a Santiago del Estero, pero no el feudo de los Juarez, sino el “estado de derecho” de Zamora, radical kirchnerista. Partido de fútbol en La Banda. Pasiones futboleras, referí cuestionado, hinchas de uno de los equipos, Sarmiento, exaltados por las cargadas de los de Unión. Se armó el bardo. Al final del partido hubo escaramuzas entre las hinchadas. La policía interceptó a los de Sarmiento. Gases de un lado, ladrillos del otro.

Hasta que empezaron los diparos. Un policía de apellido Saavedra - de entre 20 y 26 años- extrajo su reglamentaria y le disparó al pecho de Ezequiel Melián, de 17 años. Cuando Melián cayó agonizando al suelo, fue duramente golpeado por los policías colegas del asesino. Esos golpes fueron acreditados por el médico de guardia del Hospital Antenor Alvarez, de la ciudad de la Banda. Tenía hundimiento del cráneo a la altura de la frente y múltiples golpes en el rostro. También un orificio de entrada a la altura del tórax y un orificio de mayor dimensión en su espalda, el de salida.

El forense policial sostuvo que era una bala de goma, mientras la prensa canalla afirmaba que el tiro era de una “tumbera”. Otros tres hinchas están internados con heridas de arma de fuego, uno de ellos con tres disparos y al borde de la muerte. La trascendencia pública que tomó el hecho obligó a las autoridades a disponer el secuestro de las armas policiales y la detención de los treinta policías.

AHORCADOS EN TODO EL PAIS
Así como el gatillo fácil mata a lo largo y ancho del territorio, los presos aparecen “ahorcados” en todas las latitudes. Son las pandemias de lazos y nudos incompletos, de policías o penitenciarios que siempre están mirando para otro lado. En el Penal de Villa Urquiza, Tucumán, estaba detenido desde hace casi tres años Antonio Gorosito (39). Fue encontrado muerto en el baño del pabellón psiquiátrico. Por supuesto, el que lo encontró fue otro preso y los guardiacárceles lo primero que hicieron fue descolgarlo con el cuento de ver si lo reanimaban. Con ello, como siempre, alteraron la escena del crimen, borraron huellas, y armaron el dispositivo de impunidad.

El otro hecho ocurrió en Gral. Mosconi, Salta. El 23 de marzo pasado un joven de 24 años, fue detenido por un policía de civil, con el argumento de que estaba discutiendo con la esposa en un lugar público. Marcelo Castillo ingresó a la comisaría de General Mosconi alrededor de las 22:00 de ese jueves. La esposa, que fue hasta la comisaría tratando de impedir la detención, escuchó a un policía decirle a Marcelo “Ya te vamos a agarrar adentro”. A las 4 de la mañana siguiente apareció ahorcado en su celda con la camiseta que llevaba puesta. Extraño ahorcamiento, que le provocó hematomas en distintos lugares del cuerpo.

La versión de la muerte por mano propia no fue creída por la familia, ni por la sociedad de Gral. Mosconi. Al otro día, unos 500 pobladores protagonizaron una movilización de protesta frente la comisaría, con una clara acusación: lo mató la policía. Marcelo Castillo trabajaba en los proyectos de viviendas de la organización Unión de Trabajadores Desocupados (UTD) de esa localidad, organización que acompañó la protesta.

POLICÍA PUNTANA Y PARAPOLICIALES DE LA UOCRA
El lunes pasado la policía de San Luis se acuarteló, según informaron los medios, en reclamo de mejoras salariales. Sin embargo, como siempre ocurre con estas asonadas uniformadas, el eje del conflicto no pasaba por los sueldos, sino por el cuestionamiento corporativo a iniciativas provinciales sobre la organización de la fuerza policial. Concretamente los policías querían frenar la implementación del plan de seguridad pergeñado por el Hermano Alberto (Rodríguez Saa).

Resulta interesante reproducir algunos párrafos del petitorio elevado por los acuartelados al jefe policial puntano, especialmente para quienes yerran la caracterización de las fuerzas de seguridad y creen que en este tipo de episodios se vislumbra alguna forma de lucha de clases entre “trabajadores” y patrones. Arrancan los policías diciendo Los abajo firmantes, numerarios del personal a sus órdenes, nos dirigimos a Ud., a efectos de exponerle la grave situación administrativa; funcional y salarial por la que atravesamos (…). Ya de entrada dejan claro que el tema salarial es el tercero en orden de importancia. El “negociador” polical, comisario mayor retirado Alejandro Miranda, dijo al anunciar el acuerdo en declaraciones radiales, que “se concedió el aumento de sueldo”, pero aclaró que “había dos puntos más importantes y relevantes”.

Continúa el petitorio con una firme y decidida defensa del honor y prestigio de nuestra querida Institución, reclamando sentar las bases para proyectar a futuro nuestra estabilidad integral en el amplio marco que comprende la funcionalidad policial, basada principalmente en la mejora progresiva de las condiciones que optimicen el servicio y preserven el honor y prestigio de nuestra Institución; se quejan de una suerte de anarquía general en la conducción y manejo de la fuerza, y reclaman participar en la discusión de las reformas normativas que descalifican como una propuesta solapada e inconsulta.

Uno de los puntos de mayor rechazo es la decisión del gobierno provincial de que los actuales uniformados realicen controles de rutas, dejando el patrullaje urbano en manos de los nuevos efectivos a reclutar. Dice en el petitorio: verificar solamente identidades de personas, estado y número de vehículos que circulan por las mismas, y llenar innumerables planillas que, sin una determinación estratégica previa, no sirven para nada. En especial, no sirven para recaudar como lo deben hacer a diario en el patrullaje urbano. En palabras del comisario mayor retirado Miranda, “el personal policial tomó la medida porque no se podía perder la función histórica que le había sido asignada a la policía de la provincia”.

La frutilla de la torta fue la amenaza del secretario general de la UOCRA y concejal del PJ, Marcos Sosa, de realizar una movilización “peronista” como presión a los policías, al tiempo que sus “batatas” sindicales, “atentos a que no se quebrante la paz”, patrullaron las calles de San Luis y Villa Mercedes durante el acuartelamiento, y, la verdad sea dicha, salvo la falta de uniforme, no se notó la diferencia…

La UOCRA tiene una larga historia de hechos en los que ha actuado como grupo de choque parapolicial. Fueron sus patoteros los que en septiembre de 2005 llegaron a Esquel para amenazar a los integrantes de la Asamblea Vecinal que sostenía el No a la Mina; patoteros de la UOCRA fueron los que en mayo de 2004 atacaron a los manifestantes antigubernamentales en San Luis, y también los hace apenas días atacaron a los docentes neuquinos que bloqueaban el acceso a la destilería de Repsol-YPF en Plaza Huincul.

BULACIO: 15 AÑOS
Este miércoles 12 de abril, en el Hotel BAUEN, tendrá lugar la segunda reunión de coordinación con miras a la movilización por el 15 aniversario de la detención, tortura y muerte de Walter Bulacio. Una decena de colegios secundarios ya ha tenido un primer encuentro para acordar los ejes principales de la movilización que apuntará a la denuncia de las políticas represivas que el gobierno utiliza de modo preventivo para instalar entre la juventud y los pobres el temor a los uniformados y la aceptación de las condiciones de vida que el sistema capitalista impone. Esta es una práctica de todos los gobiernos democráticos que se han sucedido desde el fin de la dictadura militar.

Walter, como 1900 pibes más, murió víctima de estas políticas oficiales. Seguiremos denunciando y combatiéndolas con la organización de los familiares, amigos y compañeros. Invitamos a todos, colegios y organizaciones, a sumarse a esta pelea contra la represión y la impunidad.

LOS PATOTEROS DE FELIPILLO
Reproducimos Comunicado de Prensa:
Domingo 9 de abril de 2006.- Las organizaciones abajo firmantes repudiamos la agresión sufrida en el Centro Social Olga Vázquez por parte de un una patota vinculada al gobierno y exigimos la inmediata restitución del espacio barrial a sus legítimos ocupantes.

En la noche de ayer, un grupo –en el que se encontraba un funcionario del gobierno bonaerense- ingresó por la fuerza al local perteneciente al Frente Popular Darío Santillán, ubicado en la calle 60 entre 10 y 11 de La Plata, encadenando la entrada y apostándose en los techos con fierros, palas, baldosas y otros elementos para arrojar. Esta mañana, cuando los vecinos e integrantes de organizaciones sociales y de DDHH instaban a los usurpadores a abandonar el centro social, la patota desató un incendio de grandes dimensiones, destruyendo gran parte de la construcción, al mismo tiempo que atacaban con piedras a los miembros de organizaciones sociales y de Derechos Humanos que, en compañía de vecinos, estaban presentes en la vereda del centro. Por esta razón se encuentran con heridas en la cabeza y las manos integrantes del Frente Popular Darío Santillán.

Entre las treinta personas que irrumpieron violentamente en el lugar está Juan Manuel Fonrouge, quien se desempeña actualmente en la secretaría de Prensa del gobierno bonaerense. Por consiguiente, denunciamos que este episodio se inscribe en un ciclo de provocaciones encabezadas por sectores oficialistas contra organizaciones sociales, y sectores populares, que incluye el intento de cooptación y fragmentación de quienes muestran oposición, cuando no el ataque directo como ya sucedió en el incendio a un comedor popular de Florencio Varela.

El Centro Social Olga Vázquez es ante todo un espacio para los vecinos y la comunidad. Allí se realizan eventos culturales, ferias, exposiciones abiertas a toda la sociedad. Entre los trabajos que se intentaron impedir, también se encuentra un ciclo de cine que comienza el domingo 9, diversos emprendimientos productivos y cooperativas que intentan generar puestos de trabajos genuinos para trabajadores desocupados, como así también, un taller de Educación Popular para la comunidad, previsto para comenzar en mayo, dictado por miembros del equipo Educación Popular de la Universidad de Madres de Plaza de Mayo.

A esto se suma que en el local viven familias (cuyas pertenencias fueron destruidas por los usurpadores) y se almacena la mercadería para más de 20 comedores comunitarios de la zona.

Ante esta situación manifestamos nuestro repudio al ataque y exigimos la devolución inmediata del Centro Social a sus legítimos ocupantes, recuperando la posesión para continuar con las actividades y devolver su hogar a las familias. En este sentido es que los vecinos del barrio están haciendo circular un petitorio de apoyo, para que el local sea restituido inmediatamente.

Firmas: - Centro Social Olga Vázquez, Frente Popular Darío Santillán - HIJOS La Plata - FULP - Federación Universitaria de La Plata - Centro de Estudiantes de la Facultad de Agronomía y Forestal (Universidad Nacional de La Plata) - Centro de Estudiantes de la Facultad de Humanidades y Ciencias de la Educación - Universidad Nacional de La Plata) - Centro de Estudiantes de Exactas - Universidad Nacional de La Plata - Centro de Estudiantes de Ciencias Naturales - Universidad Nacional de La Plata - Galpón Sur - CORREPI - CAUCE, Universidad Nacional de La Plata - CEPA, Universidad Nacional de La Plata - Movimiento Socialista de los Trabajadores - Movimiento Sin Trabajo Teresa Vive - SUMA, Facultad de Ciencias Exactas, Universidad Nacional de La Plata - Movimiento Estudiantil Liberación, Universidad Nacional de La Plata - COPA estudiantil, Universidad Nacional de La Plata - UJS - PO, Universidad Nacional de La Plata - Praxis, Universidad Nacional de La Plata - Libres del Sur, Colectivo de Cultura y Acción Popular. Adhesiones al correo centro_social_olga_vazquez@yahoo.com.ar

PRÓXIMAS ACTIVIDADES

Miércoles 12 de abril, 19:00, reunión en el Hotel Bauen para organizar la actividad a 15 años de la detención y muerte de Walter Bulacio.

Sábado 22 de Abril, 21:00, Festival por la Libertad de los Presos Políticos en Libres del Sur, Av. H. Yrigoyen 1635. “Con hambre y represión no hay derechos humanos”. Bono contribución $ 3. Tocan El Portón, Dios Micrófono y Gabriel Del Barrio.

Martes 25 de abril, 19:00, charla sobre “Situación Represiva y Presos Políticos” en la Facultad de Filosofía y Letras (Puan 470), en la calle. Organiza Agrupación Norberto Blanco, participa por CORREPI la compañera María del Carmen Verdú.

Quienes deseen recibir por correo la revista ANTIRREPRESIVO pueden enviarnos su dirección postal a correpi@fibertel.com.ar

CORREPI